Un tío mío tenía (espero que aún los conserve) una buena colección de cómics, entre los cuales me marcó éste personaje.
Creado en 1972 por Steve Englehart y Jim Starlin, el hijo de Fu-Manchú, quién lo mantuvo aislado del mundo mientras le entrenaba en las más mortíferas artes marciales, renegó de su padre a la que vio de qué palo iba y se alistó, de esa manera, en el más importante y secreto grupo de espionaje inglés, el Mi-6.
Algunas de sus aventuras fueron guionizadas magistralmente por Doug Moench y dibujadas por Paul Gulacy con un estilo muy peliculero e incluso psicodélico en ocasiones.
Quién le abrió los ojos de cómo era su padre (mu pero que mu malo

Junto a éste conoció a Leiko Wu, una también agente con quién compartió más de una infiltración. Aquí cabe destacar que ella fue quién se enamoró de él. Otros compañeros de fatigas fueron Clive Reston (ex de Leiko) y Black Jack Tarr, un colega de toda la vida de Smith.
El tratamiento de los personajes, así como la manera de llevar algunas historias era sencillamente asombrosa. Una de ellas, que desemboca en la primera gran batalla contra
No puedo por más que recomendaros su lectura si tenéis ocasión. Por mi parte me bajé todo lo que pude encontrar pero la pantalla no transmite lo que se siente con el papel. Bueno, mientras tanto me quita el gusanillo, jeje.
Os dejo 4 páginas para que veáis por donde van los tiros:



